El entrenador continúa internado y pasó su tercera noche en el hospital tras el cuadro de infección urinaria que se le detectó.
MIGUEL ÁNGEL RUSSO pasó su tercera noche de internación en el sanatorio Fleni, al que ingresó el pasado martes por un procedimiento programado y se quedó porque le detectaron una infección urinaria.
El jueves se había hablado de la posibilidad de que el entrenador de Boca abandonara el nosocomio, pero los facultativos que lo atienden determinaron que se pospusiera su alta, que con suerte se produciría en la tarde del viernes, aunque no se descarta que permanezca otro día más.
Si bien se asegura que podría implementarse un tratamiento ambulatorio, los médicos prefieren tenerlo controlado y cerca, a la espera de que se terminen de normalizar los valores luego del caudro que presentó en su ingreso.
Fuentes cercanas al DT afirman que se encuentra en pleno y constante contacto con el presidente Juan Román Riquelme, el secretario técnico Marcelo Delgado y su ayudante Claudio Úbeda, que volverá a comandar el doble turno de este viernes junto con Juvenal Rodríguez.
El plantel Xeneize tendrá libre el fin de semana, fruto de una decisión que se tomó tras la victoria en Mar del Plata ante Aldosivi y que nada tiene que ver con la situación de salud de Russo, quien está con el cuerpo en el hospital pero la cabeza en el campo de entrenamiento.