Inglaterra, que se impuso en la tanda de penales a Suiza (5-3 tras empate 1-1), y Países Bajos, que remontó (2-1) ante Turquía, hicieron valer su estatus de favoritas en sus duelos de cuartos de este sábado y serán rivales en la siguiente ronda.
La semifinal entre ingleses y neerlandeses se jugará el miércoles en Dortmund. Antes de ella, España y Francia, clasificadas el viernes, abrirán la penúltima ronda del torneo con un apasionante pulso entre vecinos en Múnich.
– Saka se toma la revancha –
Entre críticas y superando obstáculos, Inglaterra ha conseguido entrar entre los cuatro mejores del continente.
Si en octavos el héroe había sido Jude Bellingham con una tijera salvadora que evitó el desastre ante los eslovacos y forzó una prórroga que terminó salvando a los ‘Tres Leones’, esta vez la clasificación vino de las manos del arquero Jordan Pickford, que detuvo el primer lanzamiento de los suizos en la tanda decisiva, el de Manuel Akanji.
Eso permitió a Inglaterra controlar desde el inicio esa tanda, en la que no hubo más fallos, en ninguno de los dos equipos.
Antes de ello, Suiza había puesto contra las cuerdas a su rival al adelantarse en el minuto 75 por medio de Breel Embolo, pero Inglaterra escapó pronto del lío al equilibrar en el 80 gracias a Bukayo Saka.
Para el mediocampista del Arsenal, este partido ha supuesto una revancha personal.
No solamente firmó ese gol que permitió llegar a la prórroga, sino que en la tanda de penales anotó su lanzamiento. Hace tres años falló su lanzamiento en la tanda de la final europea que los ingleses perdieron en Wembley ante Italia y después de aquella fue víctima de una oleada de insultos racistas en las redes sociales.
“Sabemos que quedan dos partidos más, podemos cambiar nuestras vidas y hacer historia”, se alegró Saka, premiado como mejor jugador del partido.
– Veinte años después –
También empezó perdiendo Países Bajos, aunque en su caso pudo dar la vuelta al partido antes del final del tiempo reglamentario, para llevarse el pulso por 2-1.
Un gol de cabeza de Samet Akaydin había adelantado a los otomanos en el 35 y Turquía se mantuvo con ventaja en el marcador hasta la recta final, donde la ‘Oranje’ pasó de ir perdiendo a ir ganando en apenas seis minutos, con tantos de Stefan De Vrij (70) y Mert Müldür en propia puerta (76).
Países Bajos, campeona de Europa en 1988, no disputaba una semifinal en el torneo continental desde la edición de Portugal-2004.
El equipo de Ronald Koeman tuvo una discreta primera fase, en la que llegó a clasificarse incluso como uno de los mejores terceros clasificados.
“Estoy muy orgulloso del equipo. Hemos conseguido reaccionar y lo hemos logrado permaneciendo unidos. Lo hemos dado todo hoy en el partido”, señaló el capitán Virgil Van Dijk.